Cádiz una ciudad con más tres mil años de historia, por la que han
pasado fenicios, romanos, visigodos... dejándonos una gran riqueza cultural y arquitectónica. Su posicionamiento entre dos grandes mares la hizo ser
importante en el comercio, convirtiéndose en el siglo XVIII en el puerto marítimo más importante de
Europa, llevándola a disfrutar del lujo y poder del siglo
de oro gaditano. Precisamente un 19 de Marzo de 1812 se firmo en Cádiz la Constitución, sin olvidar lo
importante que significo ese firmado de derechos para los españoles, de algún
modo también quiero dedicarle unas lineas por su bicentenario, pero escribiendo un artículo sobre mi especialidad la moda.
A través del cuadro de Salvador Viniegra "Promulgación de la Constitución de 1812" y algunos cuadros de Goya intentaré explicar a grandes escalas la indumentaria de finales del siglo XVIII en España.
Indumentaria de la Corte:
Internacionalmente se empieza imponer el Neoclasicismo en Europa, que se define por lineas más sencillas y paralelamente a nivel político en Francia Napoleón quiere crear su propio Imperio al estilo romano, como consecuencia se producen cambios en la moda de la corte. En el caso de la mujer se paso dramáticamente del vestido barroco y recargado con corsés llenos de ballenas, faldas de gran vuelo, exageradas pelucas y maquillajes empolvados tan conocidos por Maria Antonieta, a una imagen minimalista y natural con un vestido camisa mas popularmente conocido como el corte imperio, es decir corte debajo del pecho con tejidos ricos pero fluidos, normalmente sedas. En el caso del hombre se impuso el traje cortesano o "a la francesa" que consta de casaca, chupa y calzón del que luego se derivaría el traje de chaqueta actual. Este estilo se impone en toda la burguesía, nobleza y clase alta europea.
La familia de Carlos IV pintado por Goya en 1800
Podemos apreciar mas ejemplos del vestido camisero o corte impero y del traje cortesano masculino en el vestuario de la película "Orgullo y prejuicio" o es este retrato de Josefina Bonaparte.
Indumentaria del pueblo español:
La indumentaria de las clases populares, sobre todo en Madrid eran de lo más castizo, conocido como "los majos o las majas" Se caracterizaban por un rico colorido y una abundante decoración textil basada en pasamanería, madroños, encajes, caireles, cordones, cintas... era una exaltación de símbolos autóctonos. Su ropa, canciones (fandango), costumbres, diversiones (tauromaquia) era como una respuesta contra la invasión napoleónica en España.
Cuadro de Goya "La gallina ciega"
En el
caso del hombre el traje de majo se compone de camisa blanca con un fajín,
chaquetilla corta abotonada y pañuelo al cuello haciendo juego con el
fajín. El pantalón es ajustado y llega hasta debajo de las rodillas viéndose
las medias blancas. Y redecilla negra a la cabeza, rematada por una borla
o "madroño" en su extremo. En el caso de la mujer, el
traje se compone de un corpiño ajustado (terciopelos) muy escotado y un pañuelo tapándolo, mangas con farol en
hombro y luego ajustadas, redecilla a la cabeza, también doble falda de vuelo
desde la cintura a los tobillos llamada basquiña
Cuadro de Goya "La maja y los embozados"
Aunque fue un estilo propio del pueblo, con el tiempo fue fomentada por la corte y adoptada por las clases altas ante la necesidad de aparentar populismo tras la Revolución francesa. Se diferenciaban en la calidad de los tejidos y que iban bordados a mano en hilo negro. También por el uso de mantillas crudas o negras sobre la cabeza o a modo de chal (prenda que luego la reina Isabel II hará tan popular en la corte, llevándolo a convertir en un sello de identidad español y muy utilizadas en la actualidad por las madrinas de boda) La maja mas popular fue María del Pilar Teresa Cayetana de Silva y Álvarez de Toledo y Silva-Bazán, Duquesa de Alba por derecho propio, de la que Goya nos dejo famosos cuadros.
XIII Duquesa de Alba retratada por Goya 1795
Incluso la gran Ava Gardner la interpreto en la película "La maja desnuda"
También a finales del siglo XVIII es cuando se fija el arte del toreo, en un principio era a caballo cuyo publico era la nobleza, pero el espectáculo taurino se estaba haciendo cada vez más popular y prefería los toreros a pie, a los que consideraban héroes. Salían
a la plaza vestidos con la ropa típica de la época (majos) con redecilla para el pelo, pañuelo al cuello, chaquetilla, calzón hasta las rodillas y medias el cual evoluciona al goyesco y posteriormente al actual traje de luces.
Pedro Romero pintado por Goya.
Os adjunto este enlace del museo del traje en Madrid donde podréis saber más sobre este época.
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